Ayer llegábamos a nuestro puesto de trabajo con la triste noticia del fallecimiento de nuestro compañero Enric. Quiero que estas breves líneas sirvan para recordarlo siempre. 

Después de 30 años trabajando aquí, podemos decir que es y será un histórico. Quizás «mito» se acerque mejor a lo que representa para la empresa.

Una persona dedicada 100% a su trabajo y familia, tenía aquí su segunda casa. Sé que así lo sentía. Incluso en los momentos de mayor flaqueza sacó el genio, fuerza y carácter para venir a visitarnos asiduamente. Porque él también se sentía parte de esta pequeña gran familia que es CELL y así lo recordaremos. 

Dejo la sección de comentarios para quién quiera añadir alguna palabra más. Seguro que todos tenéis algún buen recuerdo que compartir. 

Donde estés, descansa en paz Enric.