Con la pandemia de Covid-19, se ha puesto en valor la importancia de la calidad del aire. En especial, de lugares cerrados como colegios y entornos laborales. El diseño del espacio y las ventanas abiertas pueden ser un buen punto de partida, pero existen alternativas que ayudarán a reducir el riesgo de transmisión de patógenos.

Los medidores de CO2

La medición de los niveles de CO2 es uno de los indicadores claves para analizar la calidad del aire. Alertan de la concentración de este gas en tiempo real. Así. controlar este indicador permite saber cuándo es el momento para ventilar y podemos optimizar el momento de tener ventanas o puertas abiertas, y no pasar frío en exceso.

Un ejemplo de medidor es el KCO2-METER. Un gadget pequeño y portátil, con batería incorporada. Por eso, es ideal para comercios, hogares o colegios. Permite medir concentraciones de CO2 de hasta 5000pp.

En este caso, una concentración menor de 800ppm se considera correcta, pero se recomienda que esté por debajo de 500 ppm.

Funciona por infrarrojos. El CO2 absorbe esta radiación de una forma característica y el medidor la detecta para determinar su concentración en el aire.

Purificadores de aire

Una vez medida la calidad del aire que respiramos, es el momento de tomar soluciones. Los purificadores de aire filtran las partículas que están es suspensión y respiramos. Para el Covid-19 están especialmente indicados aquellos que disponen de filtro HEPA, que impide el paso de las más pequeñas.

La certificación HEPA indica que puede atrapar el 99,97% de las partículas iguales o superiores a 0.3 micras.

Otro parámetro a tener en cuenta es el tamaño de la estancia. No es lo mismo una habitación pequeña que una oficina grande. De ahí que debamos estar atentos a las especificaciones del fabricante y adquirir el purificador que mejor se adapte a nuestras necesidades.

Un factor muy importante, sobre todo si se va a usar por la noche, es el ruido. Hay que tener en cuenta que los purificadores tienen un sistema de ventilación forzada que hace pasar el aire por los filtros, y esto genera un ruido. Un purificador de mejor calidad, será más silencioso y confortable.

Por último, existen tecnologías que nos ayudan a estar menos pendiente del entorno y hacen el filtrado más eficaz.

Por ejemplo, el purificador 900UV Waterfilter cuenta, además del filtro HEPA, con un ionizador de rayos UV, que ayuda a eliminar los gérmenes, virus, bacterias y moho. También dispone de su propio medidor de calidad del aire y es capaz de funcionar de forma autónoma hasta 12h, eligiendo el momento ideal para conectarse. Otro extra es la posibilidad de programarlo con desde una APP y el modo noche, que reduce el ruido de forma considerable.